En los oscuros callejones del Nueva York de los años 90, una presencia siniestra sembró el terror mediante una serie de crímenes brutales que permanecieron sin resolver durante décadas. El caso resurgió cuando las autoridades descubrieron en una vivienda abandonada del Bronx una colección macabra de cintas VHS que documentaban atrocidades inimaginables. Estas grabaciones, organizadas meticulosamente, revelaban la metodología perturbadora de un criminal que operaba en la sombra, capturando cada instante de sus sádicos rituales. La investigación sobre crímenes sin resolver en Nueva York tomó un giro aterrador cuando los detectives se dieron cuenta de que enfrentaban a un meticuloso archivista del horror. Cada cinta constituye un testimonio visual de pesadilla, mostrando escenas que van desde secuestros en estacionamientos subterráneos hasta torturas en áticos abandonados. El asesino demostraba un conocimiento profundo de la ciudad, utilizando sus espacios olvidados como escenarios para sus actuaciones más crueles. Las grabaciones de asesinatos en VHS descubiertas por la policía neoyorquina no seguían un patrón convencional, sino que parecían responder a una lógica retorcida solo comprensible para su creador. A medida que avanzaba el análisis de las cintas, los investigadores descubrieron que algunas víctimas aparecían en múltiples grabaciones, sugiriendo que el criminal mantenía a algunas con vida durante prolongados períodos de tormento. El legado visual dejado por este psicópata representa uno de los archivos criminales más extensos jamás encontrados, planteando interrogantes inquietantes sobre la naturaleza de la maldad humana. La colección de cintas de tortura y asesinatos hallada en el Bronx no solo documentaba crímenes, sino que exponía la mente retorcida detrás de ellos, mostrando cómo transformaba a seres humanos en meros objetos de su distorsionado arte. Mientras los especialistas continúan examinando este horror encapsulado en formato analógico, las preguntas sobre la identidad del responsable y el destino final de algunas víctimas aún no identificadas continúan.Pásky z Poughkeepsie ポキプシーテープ Пленки из Пукипси Траке из Покипсија Recuerdos perversos